martes, 16 de noviembre de 2010

Una experiencia religiosa con Telcel

El día de hoy les voy a contar mi primer experiencia en un centro de atención de a clientes de telcel.

Hace algunos meses adquirí un smarthphone de RIM, un blackberry bold 9000, el cual se me hace un excelente teléfono, agenda y minicomputadora. Muchos sabrán que este modelo de teléfono cuenta con una "perla" o "trackball" que cumple las funciones de un ratón de computadora. El clima húmedo y caluroso de mi bella tierra, hace sudar los dedos y nuestro buen smarthphone diseñado en Canadá, obviamente, no está concebido para ser utilizado en estos climas, por lo que el famoso "trackball" deja de funcionar con el paso del tiempo. Al menos he escuchado de otras tres personas con este mismo modelo de teléfono que han tenido problemas con el trackball, siendo el primer síntoma que deja funcionar en una dirección. Sin embargo, de la misma manera que se daña, se repara, es decir, muy fácil y rápido, cuando el problema recién comienza, dicen que basta con una limpieza interna para que quede funcionando adecuadamente. Aquí es en donde comienza mi crónica...

Al percatarme que mi trackball ya no funcionaba en una dirección (hacia arriba) decidí que era momento de hacer válida la garantía que por derecho adquirí desde el momento que compré el teléfono. Por el momento seguia utilizando el teléfono, ya que podia hacer y recibir llamadas, de igual manera con los mensajes de texto, correos electrónicos, chat, twitter, facebook, en fin, podia hacer todo con mi teléfono excepto navegar hacia arriba con mi trackball. Algunos conocidos que habian pasado por un caso similar al mio, me comentaron que habian acudido al Centro de Atención a Clientes (CAC) de telcel, y que en cuestión de minutos, su teléfono quedaba en optimas condiciones.

Decidí acudir finalmente al CAC, al llegar estaba un módulo de información, dado que era la primera vez que acudía a un lugar de esos, me acerqué a preguntar cuál y cómo era el procedimiento para hacer válida una garantía. Al acercarme una señorita de buen trato me preguntó el motivo de mi visita al CAC, se lo comenté y ella me pidió el número de mi celular, lo marcó en el teclado de su computadora y me dio un número de turno, similar al que dan en los bancos, me informó que debia formarme en la unifila, en la que habia 8 personas por delante. Hice lo que me indicó, mientras esperaba, observaba cómo iba y venia gente por todos lados, también veia que de 30 cajas en total que tiene el CAC, sólo estaban operando 10. Considerando que sólo habia 8 personas por delante, decidí perder el tiempo llenandome el cerebro de la publicidad de telcel, cuando de repente suena mi celular, alertandome que habia recibido un mensaje de texto, procedo a leerlo y era algo menos así: "Bienvenido al Centro de Atención a Clientes de Telcel, gracias por su preferencia". Se me hizo un buen detalle, al mismo tiempo que disolví la duda de cuál era el fin de pedirme mi número de celular en el módulo de información. Seguí maniatandome el cerebro leyendo más publicidad de telcel cuando vuelve a sonar mi teléfono alertandome de otro mensaje de texto, el cual ya no me daba la bienvenida, sino que me ofrecia algunas promociones de planes postpago. Eso ya no me pareció un buen detalle, pero es tolerable, lo sorprendente es que aún no me atendia nadie y ya me habian ofrecido varios planes, equipos y promociones sin haber cruzado palabra con algún agente de ventas.

Finalmente tocó mi turno, pasé al módulo número 15 y ahi estaba, con una sonrisa de galán de telenovela, esbozando un "buenas tardes, en qué puedo servirle" el buen Jaime. ¿Cómo enojarse con un jóven carismático, ojo verde, copete a la Peña Nieto, dentadura alineada y blanca? imposible, así que amablemente expliqué el problema. El jóven Jaime, dijo que me iba a proporcionar un código para ingresarlo al laboratorio y que lo revisaran los ingenieros. Hizo lo que tenia que hacer y se llevó mi teléfono, después de 10 minutos, regresa Jaime con mi teléfono en las manos y me dice con la misma sonrisa de galán de telenovela "su teléfono no se pudo reparar... hay que enviarlo al fabricante para que lo verifiquen, tarda 20 dias aproximadamente este proceso". Caray, se me hizo excesivo el tiempo, sin embargo accedí a que se llevaran mi teléfono, mientras tanto, Jaime me devolvia mi bateria, la memoria, la tapa y mi funda ya que esos artículos no son necesarios. Cuando me pide la factura de mi teléfono para verificar que aún procedia en tiempo y forma la garantía me comenta lo siguiente: "Le comento que si el fabricante detecta que el teléfono tiene humedad, algún golpe interno o fue abierto, no hacen válida la garantía y no se lo reparan, además que tendria que pagar 63 dólares aproximadamente por gastos de envio y diagnóstico". En ese momento se encendieron focos rojos, no entendía lo que el jóven me estaba diciendo, aún sin perder la paciencia le pregunté si él conocia cuál era el criterio para determinar que el teléfono llevaba humedad, debido a que yo estaba seguro que el teléfono nunca se me habia caido y tampoco se habia abierto, temiendo que consideraran como humedad lo que se pudiera haber generado por el sudor de los dedos. Dicha pregunta, Jaime no la respondió, afirmó desconocer los criterios, en ese momento cambié de parecer, comentandole a Jaime que preferia repararlo con algún técnico local dada la incertidumbre que me causaba la situación. Sin embargo, Jaime me comenta que era necesario enviarlo al fabricante porque adentro del laboratorio habia presentado problemas con teclado, en ese momento, mi semblante y mi buen sentido del humor cambió radicalmente, sin embargo aún sin externar nada, pedí amablemente mi teléfono y que de favor lo encendiera, Jaime lo hizo y oh! sorpresa!. Comienzo a utilizar mi teléfono y mi teclado era un cabaret, debido a que aplanba la letra "M" y se mostraba la "Q", presionaba la tecla "MENÚ" y se mostraba la "C". En fin, todo volteado mi teclado, entonces pregunté enfáticamente ¿A qué se debió que yo lo traia con un fallo simple y ahora no sirve nada, nisiquiera puedo navegar adecuadamente en mi teléfono? a lo que Jaime con su sonrisa de galán de telenovela respondió "Desconozcó las causas señor, ese problema lo presentó al interior del laboratorio..... cuando le echaron aire". En ese momento me arrepentí totalmente de haber puesto un pie en ese famoso CAC. Pedí desesperadamente a Jaime que me devolviera todo y que no queria saber absolutamente nada de ellos, al mismo tiempo le pedí que me diera una hoja en donde dijera quién me habia atendido y el "ingeniero" que habia revisado mi teléfono. Después de darle tres vueltas al CAC y correr de un módulo a otro, Jaime me llevó la hoja con los datos que le habia pedido, procedió a firmarla y a entregarmela. Le dije que era una incoherencia total lo que sucedia y que iba a proceder de la manera necesaria en caso de requerirlo, salí furioso del CAC.

Lo primero que hice fue ir a un lugar en donde reparan productos electrónicos a que me dijeran si mi teléfono tenia algún tipo de solución viable, rápida y poco costosa, cuando llego al lugar le comenté a la persona que me atendió el trago margo que habia pasado, diciendome que "esos de telcel le echan aire comprimido convencional a los celulares, aire que contiene humedad". Al decirme eso, muchas cosas pasaron por mi cabeza, pero consideré que RIM es una empresa seria, incapaz de coludirse con telcel para estafar gente a través de las garantías. Finalmente en el lugar al que acudí, no se que le hicieron exactamente, pero me lo regresaron en tres minutos funcionando de todo a todo.

De esto cada quien podrá sacar sus propias conclusiones, dicen que cada quién habla conforme le fue a la fiesta, y a mi me fue mal con telcel, fue como una experiencia religiosa